Artículos y noticias de el lipedema
Un poco de historia sobre la liposucción
Hoy os vamos a relatar cómo nace y cómo evoluciona la liposucción ya que muchas de las pacientes que nos visitan sufren lipedema y gracias a esta técnica de liposucción podemos devolverles la armonía en sus cuerpos.
La liposucción es una técnica relativamente “reciente”; no hace mucho tiempo, para los casos de lipodistrofia, sólo existía una intervención quirúrgica que consistía en cortar la piel junto con tejido adiposo sobrante cosiendo ambos extremos, dejando unas largas cicatrices poco estéticas, y además, obteniendo un resultado plagado de irregularidades.
Fue en 1974, cuando el doctor Giorgio Fischer, ginecólogo italiano, inventó la liposucción con fines obstétricos. Posteriormente, el doctor Gerard Illouz ideó en Francia en 1977 esta la técnica con fines estéticos, usando una cánula roma conectada a una máquina que succionaba ese tejido graso para moldear la silueta. Las cánulas eran introducidas debajo de la piel por unos orificios, realizando movimientos enérgicos para romper el tejido graso a la vez que la grasa desprendida se aspiraba. Pero todavía quedaban irregularidades y los resultados no eran del todo buenos. Las cánulas eran de mayor grosor, y podían darse ciertas complicaciones como edemas y hemorragias severas.
En 1985, los dermatólogos Dr. Jeffrey Klein y Dr. Patrick Lillis inventan la técnica tumescente de Klein, gracias a la cual comienzan a obtenerse unos resultados incomparables, consistente en una solución acuosa formada por suero salino estéril, adrenalina (vasoconstrictor), lidocaína (anestésico local) y bicarbonato.
El Dr. Chamosa, fue uno de los pioneros en el desarrollo de la liposucción en las zonas de rodillas y tobillos, obteniendo premios de manos de los propios inventores de la técnica. Durante los más de 40 años de carrera profesional ha ido perfeccionando su técnica, alcanzando a día de hoy unos resultados inigualables.
El Doctor Chamosa recibiendo un galardón por del Doctor Illouz creador de la liposucción
Hay que tener en cuenta que la liposucción no es una técnica pensada para reducir peso, ni para tratar el sobrepeso u obesidad; esta técnica está desarrollada para eliminar acumulación de grasa localizada que no responde a dieta ni ejercicio, como ocurre por ejemplo en la enfermedad de lipedema, y para mejorar la forma corporal, remodelando ciertas partes del cuerpo para obtener un resultado armónico, proporcionado o anatómico.
Actualmente la liposucción se sitúa en los primeros puestos en las listas de las cirugías plásticas más realizadas en España en mujeres según la SECPRE (Sociedad Española de Cirugía Plástica Reparadora y Estética), siendo el segundo puesto el otorgado a esta cirugía, es superada solamente por el aumento de mamas. Este éxito ha sido liderado en los últimos años por la aparición del término lipedema, enfermedad denominada como tal por la OMS en 2018, que cursa con una acumulación de grasa indeseada cuya eliminación no responde a dietas ni ejercicio y que gracias a la cirugía plástica podemos tratar y dar forma a nuestros cuerpos.
En Clínica Chamosa llevamos tratando pacientes de lipedema desde mucho antes de que se conociera el propio término lipedema, ya que esta es una enfermedad que ha existido siempre y, gracias a la liposucción, se puede devolver la forma anatómica a las pacientes que, por ejemplo, han perdido la forma en sus tobillos, pantorrillas o rodillas. Al ser reconocida la técnica en EEUU e internacionalmente desde el año 1997, podemos afirmar que somos pioneros en tratar el lipedema.
Evolución de la técnica
La liposucción es la técnica quirúrgica por medio de la cual se extrae tejido adiposo de determinadas zonas del cuerpo.
Inicialmente la liposucción era una intervención denominada “seca”, se extraía la grasa mediante succión sin añadir ninguna solución acuosa, mediante una cánula y un equipo de extracción de grasa, de presión negativa.
Más tarde se comienza a utilizar la liposucción “húmeda”, esto quiere decir que el cirujano va a inyectar una solución acuosa para engrosar la zona a tratar y luego extraer la combinación de ambas, agua y grasa.
Una vez se inventa la liposucción tumescente de Klein en 1987 se avanza en gran medida en la técnica. Este método permite el adormecimiento de las zonas a tratar mediante anestesia local, reducir el trauma, disminuir el dolor, el sangrado y las complicaciones. Mediante esta técnica tumescente vamos a añadir más líquido que la grasa que se va a extraer, para engrosar la zona a tratar, y tener resultados más precisos. Al contener lidocaína, anestésico local, no se hace necesario el uso de la anestesia general, simplemente se realiza una sedación intravenosa. Después se introduce la cánula por un pequeño orificio de 4mm y con un movimiento constante se van rompiendo los depósitos grasos que junto con la solución de Klein son succionados hasta el interior de una bolsa recolectora.
Evolución del término liposucción
A lo largo de los años, múltiples nombres se han utilizado para designar a esta técnica, sobre todo por modas o para diferenciarse individualmente, pero refiriéndose a la misma técnica original, es decir, liposucciones modificadas en la forma de destruir la grasa y en la forma de succionarla, pero definitivamente una liposucción; lipo=grasa, succión=extraer.
Estos son algunos nombres que han estado o están de moda para referirse a esta técnica:
Lipectomía por aspiración
Lipectomía por succión
Lipoaspiración
Lipoescultura
Esteatoplastia
Esteatoexéresis
Lipoplastia
Lipoexeresis…
En cuanto a las posibles variaciones en cuanto a la forma de destruir y forma de succionar la grasa nos encontramos con diferentes técnicas:
Liposucción tumescente de Klein. Liposucción que usa una solución de suero infiltrada de forma suave que cuida los tejidos que luego se va a succionar junto con el tejido graso. Se utiliza anestesia local más sedación.
WAL (Water Assisted Liposuction): Liposucción usando presión de agua para arrancar la grasa de los tejidos más succión. Se practica con anestesia general.
Vaser o liposucción por ultrasonidos: Liposucción que utiliza ultrasonidos para romper el tejido graso y después succionarlo. No se recomienda en zonas muy delicadas como tobillos o rodillas. Se practica con anestesia general.
Lipoláser o láserlipolisis: Técnica de liposucción que emplea una luz de láser para destruir el tejido graso mediante una luz ultra potente no aconsejada en muchos casos
Liposucción con jeringa. Técnica muy poco utilizada salvo pequeñas zonas, donde no se utiliza ningún tipo de maquinaria para succionar, es la propia presión succionadora de la jeringa la que hace que la grasa sea extraída
Vibrolipo: Liposucción que utiliza maquinaria vibratoria que sirve para romper el tejido graso gracias a la ayuda neumática.
Evolución del material
También hay que hacer mención al desarrollo que han tenido las máquinas de aspiración que se utilizan. Tal y como hemos mencionado en el apartado anterior, nuevas técnicas que utilizan aparatología se han ido desarrollando a lo largo de la historia, promovidas por una industria que se mueve por fines económicos y que no siempre acompaña a avances en el campo de la medicina, sino que se quedan en simples modas que nos hacen creer en su magia y que tienden a desaparecer con el tiempo.
Desde su invención, parte de la industria ha sacado al mercado diferentes maquinas y equipos de liposucción, utilizando ultrasonidos, láser o agua a presión con el fin de asistir a los cirujanos y facilitar el trabajo. Todas estas herramientas se han ido desechando por sus pobres resultados poco estéticos, siendo la liposucción tumescente de Klein y la mano de un experto cirujano plástico la que ofrece mejores garantías.
Además, la tendencia lo largo de los años, ha sido la de hacer las cánulas más finas y más precisas para que las incisiones sean menores y las cicatrices prácticamente desaparezcan. Esto siempre que se use la técnica de liposucción tumescente de Klein, ya que el uso de la técnica wal, laser y ultrasonidos necesitan un tamaño de incisión mayor (cerca de los 2cm) para poder introducir las cánulas que van asociadas a dos conductos uno de aspiración y otro de inyección de agua a presión o la luz del láser por tanto necesita un orificio de entrada mayor.
Evolución de la anestesia
En los principios de esta técnica, se utilizaba la anestesia general y se pautaba el ingreso hospitalario, pero cirujanos como los del equipo del Dr Chamosa apuestan por la utilización de la anestesia local más sedación para realizar esta técnica para que las molestias y la recuperación sean mejores así como la propia seguridad y tranquilidad de las pacientes.
Así mismo gracias a la utilización de anestesia local más sedación y dependiendo de los litros de grasa extraídos las pacientes pueden irse a su domicilio el mismo día de la intervención. Por este mismo motivo, al reducir la hospitalización de la paciente, implica menos coste para las mismas.
Esta utilización de anestesia local sólo es posible con la técnica de liposucción tumescente ya que para otras técnicas como liposucción wal o vaser se utiliza la anestesia general para evitar los dolores que se producen en el tejido adiposo a extirpar.
Y hasta aquí un pedacito de historia, esperamos os haya parecido interesante.